Elías Jaua Milano.
Una mañana, en una conversación reflexiva
con nuestro Comandante Chávez, caminando entre arboles de eucaliptus,
yo le recordaba que en la primera campaña electoral, la de 1998, el
momento de más emoción en las concentraciones populares era cuando él
decía, con voz vibrante: “Porque nosotros llevamos en el alma y en la
sangre el coraje de los libertadores de todo este continente”. El me
respondió, más o menos así, lo que pasa Elías es que los pueblos que han
hecho grandes cosas, llevan un fuego sagrado por dentro, y los
venezolanos protagonizamos una gran épica, darle independencia a todo
este continente.
Nos sobra patriotismo, coraje y lealtad a Chávez |
Han pasado seis años de esa conversación y
cinco años del trauma histórico que significo su partida física, nos
han hecho de todo, nos ha pasado de todo. Lo primero perderlo a él y su
peso histórico; luego vino el desconocimiento violento de la victoria de
nuestro compañero Nicolás Maduro, mientras se daba inicio a la guerra
económica a través de la especulación cambiaria, el contrabando de
extracción de todos los productos, hasta del papel moneda, el
desabastecimiento y la agresión especulativa en todos los precios; en el
contexto de una brutal caída de los precios petroleros.
El 20 de mayo votaremos por Maduro para una contraofensiva revolucionaria. |
Toda esta situación nos llevó a una
derrota electoral en las elecciones parlamentarias en 2015, dando paso a
un periodo de grave desestabilización institucional. En estos cinco
años, ha habido dos intentos de llevarnos a la guerra civil por parte
del imperialismo y sus lacayos internos, en 2014 y en 2017, con el
desarrollo de una estrategia para promover el odio social y la violencia
terrorista y desatar así la llamada “Guerra de perros”, hermanos,
contra hermanos.
Como Nación hemos sido declarados una
amenaza inusual y extraordinaria por el gobierno imperial de los Estados
Unidos, declaración que se ha traducido en sanciones, congelamiento de
recursos nacionales, bloqueo financiero y comercial afectando nuestras
capacidades de importación y producción de bienes esenciales y de
prestación de servicios públicos.
Hemos sufrido traiciones de quienes a lo
interno, como nos los advirtió Chávez el 8 de diciembre de 2012, se han
aprovechado de estas circunstancias difíciles. Restauración de los
poderes fácticos del capitalismo; corrupción de altos funcionarios;
aparición de mafias que se apropian de los bienes y servicios que son
del pueblo; deserciones hacia el imperio y pare Ud., de contar.
Parafraseando al Comandante Fidel, cuando
se refirió al papel de pueblo cubano en el periodo especial tras la
caída de la Unión Soviética, nosotros diremos que para soportar cinco
años de agresión diaria en todos los frentes, económico, político,
social, militar, ético hacía falta patriotismo, coraje, dignidad y
lealtad al Comandante Chávez. Esos valores, como pueblo, los hemos
tenido de sobra.
Desde la resistencia, el dolor y la
angustia hemos encontrado la forma de evitar la confrontación total y
lograr retomar el camino democrático y electoral, a partir de la
iniciativa del Presidente Nicolás Maduro, de convocar a elecciones para
una Asamblea Nacional Constituyente.
Estamos en víspera de las elecciones
presidenciales, en una semana, el 20 de mayo, a pesar del boicot
imperialista contra nuestra democracia, votaremos en ejercicio de
nuestro derecho a la autodeterminación nacional y nosotros los y las
chavistas estamos construyendo una gran victoria para la revolución
bolivariana, reeligiendo a nuestro compañero Nicolás Maduro.
Ahora bien, toda esta heroica resistencia
que hemos protagonizado como pueblo tenemos que convertirla en fuerza
orgánica, en tareas específicas, para consolidar la Independencia y
recuperar la prosperidad nacional contra todo el sistema de agresión
extranjera que nos están aplicando.
Pero también se requiere una acción
consciente y concreta para desmotar el sistema de grandes y pequeñas
mafias que han ocupado la economía diaria afectando la vida cotidiana de
la familia venezolana; para combatir la aparición de viejas prácticas
del burocratismo autoritario, tales como el acoso político a quien hace
uso de la sana y necesaria critica revolucionaria o el atropello laboral
creciente, entre otras; para confrontar en el plano de la batalla de
ideas el empeño de algunos de subordinar la revolución a la hegemonía
del capitalismo rentístico.
En fin de la resistencia pasemos a una
contraofensiva revolucionaria para contener con eficacia la afrenta
imperialista, restaurar a plenitud la ética revolucionaria y seguir
nuestro proceso de democratización de la sociedad a través del
fortalecimiento y expansión del poder popular. Más allá del 20 de mayo,
la lucha sigue.
Mil bendiciones a las madres que nos parieron patriotas |
En el día de las madres, nuestro
agradecimiento a ellas por enseñarnos el valor del coraje, de la
dignidad, del patriotismo, del bolivarianismo. Mil bendiciones para
todas Uds.
Te
invitamos a visitar la página del Ministro del Poder Popular para la
Educación Elías Jaua Milano donde podrás leer este y otros interesantes
artículos por él publicados pulsando el soguiente enlace:
https://eliasjauavzla.wordpress.com
Comentarios
Publicar un comentario